La instalación de drenaje es una medida inviable en localidades de muy alta marginación con difícil acceso ya que, en el campo hemos encontrado que al no contar con una planta tratadora de aguas, las aguas negras son descargadas directamente al río y esto provoca graves problemas de salud. Esta situación ya ha sido denunciada por Unidos por la Montaña ante las autoridades competentes y se está emprendiendo una lucha para evitar que esta práctica se siga replicando a nivel nacional.
Como alternativa para que estas comunidades accedan a espacios dignos de saneamiento que no impacten ni la salud de los habitantes ni el medio ambiente se construyen sanitarios ecológicos secos.