En localidades rurales de muy alta marginación hay una alta incidencia de distintos tipos de cáncer derivado del uso indiscriminado de herbicidas y plaguicidas, muchos de ellos prohibidos por la Organización Mundial de la Salud en distintos países, por este motivo, el capacitar a las comunidades en la producción agroecológica de alimentos es una medida que impacta en la nutrición y salud integral de las comunidades, eliminando de manera paralela el impacto al medio ambiente.
Hasta el momento se han logrado hacer productivos más de 38,000 m2 de tierra para generar hortalizas que están beneficiando a 348 familias.
Los huertos utilizan semillas de polinización abierta y están libres del uso de agroquímicos.